DÍA 3

Kanchanabury - Ayutthaya - Phitsanulok

 

A las 05:45 ha sonado el despertador y tras el ritual matutino, hemos ido a desayunar. Aquí debe amanecer a las 05:30 y a esa hora ya hace bochorno. Por suerte, en todos los alojamientos hay aire acondicionado. Tras el desayuno, hemos vuelto al embarcadero y una lancha nos ha llevado hasta el autocar. Ahora nos quedan por recorrer 60km hasta Kanchanaburi (ciudad) por carretera (ayer lo hicimos en tren). La circulación es bastante caótica, se conduce por la izquierda y no se respetan las marcas viales y por supuesto, las motos van como locas (los amuletos deben ser muy poderosos).

Cabeza de Buda en  Wat Maha That

Wat Maha That

El guía, que es un cachondo, nos ha explicado un poco de la historia de Indochina y parece muy interesante.

Después de pasar la ciudad de Uthong hemos hecho una parada técnica para estirar las piernas y hemos comprado algunas chucherías tailandesas...patatas fritas sabor sushi y sabor tempura de gambas, cuando las pruebe ya comentaré la experiencia. Antes de la parada hemos visto unos puestos de comida en el arcén de la carretera que ofrecían deliciosa carne de rata asada que según el guía, es muy buena y es más cara que la de cerdo.

Phra Prang Sam Yod (ciudad de los monos)

Tras un ratito más de bus el guía nos ha obsequiado con la visita al templo de Wat Chaiwatanaram  cerca de Ayutthaya y que está fuera de programa. El año pasado la zona no era visitable porque estaba inundada. Tras la visita sorpresa al templo hemos ido al Templo Wat Maha That en Ayutthaya, famoso por la  cabeza de Buda que está enroscada en las raíces de un árbol. Este templo está construido sobre un templo original camboyano. Ayutthaya fue la 2ª capital en la historia de Tailandia y la que controló más territorio. Después de este templo hemos ido al Templo Wataichaimongkhol (Ayutthaya) que tiene una pagoda de estilo Shri Lanka de más de 70m de altura y un cuadro de una batalla con elefantes bastante famoso. En esta ocasión al ser domingo, el templo estaba lleno de tailandeses de fin de semana. Después de la visita hemos ido a comer y luego a visitar el "Templo de los monos" que fue construido por los jamer (camboyanos) en el s.XIII el templo se llama Phra Prang Sam Yod y es bastante ruinoso además de estar habitado por monos. Al parecer los humanos convirtieron esa parte de la jungla en ciudad y los monos se quedaron (porque los alimentan). Es mejor no darles de comer porque pueden tener enfermedades y piojos.

Wat Mahathat

Triciclo y porteador en Phitsanulok

Tras otro rato de autocar hemos llegado finalmente a Phitsanulok final de etapa. El hotel en esta ocasión ha sido el TopLand que estaba bastante bien. El guía sugirió que alquiláramos unos triciclos (con pedaleante) para recorrer la ciudad y ahí que nos fuimos todo el grupo en plan Ángeles del Infierno pero en bici. Mi pedaleador era súper canijo y me hacía sufrir por la integridad de sus piernas...pero al final resultó que estaba súper curtido. Con las bicis pasamos por el templo de Wat Mahathat que contiene el original del buda del Templo de Mármol (Bangkok). De ahí fuimos a un mercado de comida dónde nos habían preparado una degustación de bichos (grillos, saltamontes, gusanos de seda , ranitas, intestinos de pollo y alguna cosa más) y unos chupitos de licor de arroz para que bajaran mejor. He de decir que no se como saben porque no me atreví aunque me comentaron que los saltamontes sabían como las pipas paprika y el resto sabía como el pollo (estaremos en Matrix?). De ahí fuimos al mercado nocturno y luego a ver "la espinaca voladora" que se encuentra en la zona de restaurantes al final del mercado. La actuación consiste en subir a un incauto turista vestido con un mandil a lo alto de la una plataforma a más de 2m del suelo con una tapadera/plato en una mano y mientras tanto en la cocina preparan una especie de espinacas (morning glory) en un wok y cuando están listas las lanzan desde la puerta de la cocina hacia la plataforma y el turista las tiene que coger al vuelo (10m).

Aperitivo Thai

Nuestros voluntarios lo han hecho de fábula y hemos podido picar un poco de esta planta que estaba muy buena. Tras el ágape hemos vuelto a los triciclos que nos han dejado en el hotel.